En su tradicional cóctel de fin de año, la Federación de Empresas Navieras Argentinas (FENA), llamó a trabajar sobre «objetivos comunes» y sostener la «mirada de mediano y largo plazo»…
En su tradicional cóctel de fin de año, la Federación de Empresas Navieras Argentinas (FENA), llamó a trabajar sobre “objetivos comunes” y sostener la “mirada de mediano y largo plazo” mientras se continúa trabajando en la reglamentación de artículos clave de la Ley de Marina Mercante y se explora “el desarrollo del tráfico de cabotaje” de la mano de una logística enmarcada en la “economía del transporte intermodal”.
La Comisión Directiva de FENA, que preside José Pablo Elverdín, estuvo acompañada por la comunidad del sector y autoridades de los ministerios y carteras afines de Transporte, Producción, del Congreso y de la Armada y Prefectura. Asimismo, asistieron empresarios y sindicalistas de la actividad naviera y naval, cargadores y actores de la logística.
Elverdín señaló que el desarrollo de la actividad requiere un “nuevo paradigma de relacionamiento” y abogó por un “diálogo sincero y permanente, con la vocación de colaborar y trascender los egoísmos” y donde “se privilegien los objetivos comunes”.
Ejes de trabajo
Tras convocar a que toda la comunidad fluviomarítima se encolumne detrás de “una lucha conjunta, para que, de una vez por todas el sector tenga una mirada de mediano y largo plazo”, propuso continuar trabajando sobre tres ejes:
Impulsar los artículos vetados y reglamentar los pendientes de la ley de marina mercante (ley 27.419), complementándola con un registro especial que permita competir en el tráfico internacional.
Acordar con los gremios convenios de trabajo “asimilables” para el tráfico internacional.
Trabajar en mesas de diálogo permanentes con Aduana, Prefectura, Armada y otros organismos estatales para “superar las deficiencias logísticas”.
Desarrollar el tráfico de cabotaje de la mano de una logística integrada a una economía del transporte intermodal (ETI).
“Estamos hablando de la marina mercante, armadores, buques y tripulantes argentinos que, a partir del consenso, el diálogo sincero y permanente tienen la potencia suficiente para impulsar y contribuir para el desarrollo sustentable de la Nación: Hablamos de: contribuir al cuidado del medioambiente a través de la disminución de la huella de carbono, atraer inversiones, captar divisas para equilibrar la balanza comercial y generar trabajo calificado”, concluyó Elverdín.