El titular del gremio de los fluviales enfatizó la importancia de una reforma laboral para los sectores productivos que garantice los derechos de los trabajadores. Advirtió que la CGT debe discutir los problemas y no ampararse en el ejemplo de Brasil.
El secretario general del Centro de Patrones y Oficiales Fluviales de Pesca y Cabotaje Marítimo, Julio González Insfrán, apoyó la iniciativa del gobierno nacional de realizar una reforma laboral tratada de forma sectorial, según cada rama de la producción, con el objetivo de “aggiornar” a la Argentina y ser un país “competitivo”.
En diálogo con el programa radial Política del Sur, González Insfrán afirmó que desde su gremio hicieron un confederado para que la CGT se siente a negociar y acompañe el “proceso de transformación” que conllevaría la inminente reforma laboral garantizando que sea “beneficioso” para el movimiento obrero. Recalcó la necesidad de transformar los sectores productivos del país para generar grandes exportaciones y mejorar la balanza comercial.
“Necesitamos ser competitivos, pero eso no quiere decir ir en contra de los derechos de los trabajadores ni tampoco destruir las fuentes de trabajo. No tenemos que tener miedo de sentarnos a discutir o negociar”, manifestó el dirigente.
No obstante, minimizó el ejemplo del modelo laboral brasileño actual -que apuesta a una extrema flexibilización- y aseguró que no es comparable con el argentino. “Tenemos que tener confianza en que tenemos un movimiento organizado y prudente. Hay que discutir los problemas de la Argentina y no decir que nos toca lo que los brasileros eligieron, sino la CGT está desdibujada”, advirtió.
Asimismo, expresó su apoyo al oficialismo y su conformidad ante el triunfo electoral de Cambiemos. Garantizó que el macrismo intenta “cambiar las cosas” en el país y “meter en cana a los chorros” del gobierno anterior. “Este gobierno, su mérito, tiene que ser volver a tener una política que no sea corrupta. Necesitamos un gobierno que ponga en marcha un modelo de país serio, y Cambiemos tiene la intención de hacerlo”, garantizó.
Por otro lado, González Insfrán habló de la ley impulsada desde su gremio para regularizar la situación de la marina mercante y explicó que la discusión que traba su sanción es la reforma fiscal que necesitan los barcos nacionales para posicionarse de forma competitiva en el mercado comparado a otros transportes extranjeros.
Además, el gremio de los fluviales se encuentra en pleno desarrollo electoral, el cual durará un mes para garantizar la votación de quienes se encuentran embarcados. Finalizará el próximo 13 de noviembre, cuando se sabrá cuál de los dirigentes de las tres listas presentadas conducirá.